Descripción
Los agentes especiales Shaw y McGregor se encargan actualmente de los casos de rutina, que es tal como le gustan las cosas a Shaw. Se acerca a los 40 y, quemada profesionalmente, los espantosos recuerdos de su última investigación siguen acechándole en las sombras. McGregor es más joven, más comprometido con el trabajo, aferrado a cierta clase de idealismo contra cualquier cosa con la que el mundo pueda salpicarle.